Cinco dedos formando una mano
Alto agitan un cetro de honor,
Ese honor tan centroamericano,
Que se vuelca en ayuda y amor.
El apoyo que nos han brindado
No podemos jamás olvidar,
Por el aire y por tierra a llegado,
Ni un instante nos hizo esperar.
Honduras y el Salvador,
Se unieron como lo mejor;
Guatemala que está agradecida
Desearía sanaran heridas.
Que olvidando rencillas pasadas
Ante el recio dolor que vibramos,
Se estrecharon de nuevo las manos
Y dejaron las cuentas saldadas.
Costa Rica la bella y florida
Has venido ayudar sin medida,
Y Managua aún convaleciente,
Nos expresa lo mucho que siente.
Panameño que brindas sonrisa
Al amigo que allá, te visita;
También hoy has venido de prisa,
A aliviar de mi tierra las cuitas.
Mejicanos al grito de guerra
¡Que de al pelo! Llegaron aquí,
Se sintieron en toda mi tierra,
No se puede olvidar algo así.
Norte América unida llegó,
Con sus máquinas y con sus aviones
Y del mundo la voz se escuchó,
Expresándola en mil donaciones.
No deseo olvidar en mi verso
Al país que nos vino ayudar
Y por eso doy gracias al mundo,
Porque el mundo es en todo lugar.
Yo quisiera tener en mi voz,
El alcance hacia muchas naciones
Y poderles decir con ardor,
Lo que sienten nuestros corazones.
Suena poco la palabra escrita,
Para darle las gracias al mundo,
Más mi alma desde lo profundo
Con el verso las gracias les grita.
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